Y si me imagino esquivando balas?
¿Balas que rocen mi desordenado pelo veraniego?
¿Balas que desconozcan razones, sueños y anhelos?
El campo de batalla.
Tan claro y sombrío al mismo tiempo.
La claridad proveniente de la soleada mañana que nos acoge
Lo sombrío, porque los cuerpos inmóviles de los caídos
cubren los campos, dando sombra a las flores sedientas de Atp.
Repaso un poco la estrategia que se me fue explicada
antes de lanzarme en el paracaídas:
Corre... Escóndete... Apunta... Mata
La simpleza es la reina de los deseos aplicados
los deseos reales
reina entre los reales
a ti acudo ante que el refulgir de los cañones acaben con mi vida
Llamo a la alegría y a la fuerza
a la simpleza y a los tragos de Ginebra.
17 octubre 2008
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